lunes, 21 de noviembre de 2011

el vagabundo


Viendo la bello de la vida, viendo la recompensa, el consuelo de una vida frustrada, de un sentimiento que ata, que encadena a un sufrimiento, a una impotencia, a una vida lejana, lejos, lejos de la vida, lejos del amor, lejos de ti, lejos de mí, lejos de todo lo que quisiera, lejos de la libertad anhelada, viendo volar, viéndola cantar, viéndola mirar a este pobre desangrar.
Muriendo lento, muriendo poco a poco, sangrando y agonizando, mirando el cielo, buscando a dios, buscando el milagro, el milagro de la creación, creación del universo, creación del mundo, creación de un humano, creación de un vagabundo, un vagabundo que vaga, que vaga por su dolor, queriendo no afrontar a la emoción, castigo de si, castigándose a sí mismo, castigándose de su pasado, castigando al enfermo, castigando al castigado.
                Buscando el milagro, esperando este, esperando el tacto divino, esperando al creador del mundo, buscando el perdón, buscando la bendición. Queriendo comulgar, para mi libertad encontrar, queriendo ser libre para el amor disfrutar.
                Los ojos del mundo, postrados en ser, recordando lo inmundo, empezando el juicio a crecer, juicio de lo estéril, juicio que no ha de ceder, viendo al vagabundo pedir su limosna, pidiendo que alguien pudiera entender, cargando al mundo, cargando su mundo, cargando el costal de miserias, miserias que no lo dejan caminar, miserias que no quiere cargar, sin saber soltar, lo bueno es que hay quien lo ayuda a cargar, sino muerte seguro ya debería estar.
                Y yo aquí plasmando la vista y el ver, el sentir de un ser, liberando la carga de un vagabundo, barbón, mugroso, descalzo y sin un buen ver, vagabundo que vaga y vagara hasta encontrar a dios tener.
                Un dios que no ha encontrado un dios que no le ha hablado, un dios que no ha perdonado, un dios que exige tanto, un dios que veo,  que solo soy yo, sin ser dios, sin creerme serlo, porque no veo más allá de lo que mi razón da, sin llegar a la emoción, porque dios no es razón, porque dios no es idea, dios es esencia, dios es más de lo que las letras pueden llegar a plasmar, más allá de lo que el corazón puede llegar a expresar, de lo que con las palabras puedes llegar a hablar, pero en fin a todo eso que no es nada y que lo es todo yo he de llegar, a la inmortalidad, porque inmortales somos, porque la vida y lo mortal, solo es una nube pasajera, porque después de eso llegas al ser y si crees que eres, serás, y si lo eres ya chingaste, pero para llegar a eso primero tienes que dejar de ser, y para eso quiero saber quién soy. Porque soy mis ideas, porque soy mi emoción, porque después de eso llego al ser, llego a la esencia contacto con lo divino, llego a la armonía llego alá comunión, llego al don
                Un vagabundo que quiere ser, para no ver, que vagabundo esta, hambre y sed, y que desea volar, el pelo crece, mugroso sigo, no me bañare hasta libre poder ser.
                Observando lo bello, lo chulo que me han dado, las playas con sus olas, los paraísos con sus diosas, sin poderlas tocar, sin poderlas besar los senos acariciar y las nalgas tocar, chaquetas mentales que un día hare realidad y una de todas esas diosas me tendrá que querer, no me juzgues si conocer, no me trates con desdén porque a pesar de lo mugroso que soy, algo podre ofrecer, no me juzgues sin conocer que de eso hasta la madre el vago esta…

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